Nuevos Datos Muestran la Profundidad del Descontento de los Colaboradores
Victor Lipman
Si estuviese todavía en la gestión
y dijese que menos de la cuarta parte de los colaboradores están
“comprometidos” y trabajando de manera totalmente productiva,
estaría…preocupado. Dicho criterio es una pieza clave de los nuevos datos de un
estudio sobre el compromiso de los colaboradores realizado por Dale Carnegie
Training®.
De acuerdo con la investigación a
nivel nacional hecha en 2012 sobre 1.500 colaboradores de entre 18 y 61 años:
-Sólo el 23 % de
los colaboradores (no-directivos) están comprometidos. Para el nivel gerencial la cifra
es del 45%. Este número, más alto es lógico dado que, como gerentes, son
naturalmente mejor remunerados e intervienen en el éxito de la organización.
-El 69% de los colaboradores no
comprometidos dejarían su trabajo actual por solo un 5% de aumento salarial. Además, los colaboradores no
comprometidos, tienen el doble de probabilidades de dejar sus trabajos por
cualquier aumento salarial, en comparación con los colaboradores comprometidos.
-El 80% de los colaboradores que
se sienten “insatisfechos” con sus supervisores no están “comprometidos”. Esto es totalmente coherente con
la idea, ampliamente aceptada, de que la relación de un colaborador con su jefe
directo es fundamental para influir en el nivel de compromiso, otro hallazgo
del estudio.
-El 61% de los colaboradores que
sienten confianza en sus directores, siente que están llevando a la
organización en la dirección correcta. Esto pone de relieve la importancia de cómo son percibidos
de los dirigentes de alto rango, más allá de solo la gestión de primera línea.
Todas estas consideraciones, no
son sólo un lindo cuadro, si se considera que el 23% de nivel de compromiso
significa que menos de 1 de cada 4 colaboradores que hacen la mayor parte del
trabajo (es decir no directivos) está trabajando a productividad
completa.
Si yo fuera director general o
director de recursos humanos y tendría este tipo de números en mi lugar de
trabajo, tendría algunas preguntas:
¿Estamos eligiendo a las personas
equivocadas para la gestión?
¿Estamos eligiendo a las personas
adecuadas pero ellos no tienen la formación adecuada?
¿Estamos haciendo que los
colaboradores hagan más por menos de forma continua?
¿Estamos agotando a nuestros
colaboradores a través de múltiples despidos, recortes de beneficios y otros
factores de estrés?
Comenzará sólo con estas preguntas… y me gustaría tener
respuestas rápidas y significativas.
FUENTE. Revista Forbes. Febrero 22, 2013